Esto compartió el párroco de la Parroquia La Merced, en un posteo originado desde sus redes sociales:
Llego a Viedma y lo primero que me encuentro es con la triste noticia de la muerte violenta de Axel Luna, joven del Barrio Álvarez Guerrero.
Nuestros jóvenes se matan entre ellos. El alto consumo problemático de sustancias, las historias familiares, la esclavitud a ciertos códigos que someten y nunca liberan, la falta de oportunidades, la estigmatización, el miedo, la exclusión, etc hacen que se generen estás situaciones realmente tristes, pero a la vez peligrosas.
La muerte de un joven siempre genera una corriente de violencia en cadena, que puede convertirse en más violencia sobre la que ya hay. No podemos decir que no se está haciendo nada, pero si podríamos preguntarnos si es todo lo que se puede hacer. Axel y tantos otros han sido niños. Muchos de ellos lo siguen siendo. Pensemos y reflexionemos como sociedad en esta situación concreta.
Que no se paralice la Argentina entorno a las Paso, sino que todo el aparato Estatal se comprometa de verdad con estas situaciones que claman al cielo y que ponen en evidencia, que el trabajo que realizamos desde el Estado y las instituciones de la Organización Civil son insuficientes .Con tristeza te despido querido Axel. Y para colmo no voy a poder ni estar un rato junto a tu cuerpo ya sin vida por estar en cuarentena, como consecuencia de mi entrada al país.
Ayuda y echa un cablecito desde arriba para que pongamos punto y final a tanta violencia.
En tu corazón siempre había un lugarcito para sentir de otra forma diferente a la que externamente manifestabas. Lo pude comprobar. Que el Dios de la vida te tenga junto a él querido Axel.

